No estaba ni llena, ni más brillante, pero estaba preciosa. Siempre lo está, ¿verdad? Lo cierto es que me siento realmente estúpida escribiendo esto. ¿Qué hace esta pirada contándole sus cosas a un satélite? Pero... ¿No sois vosotros los que os apasiona lo natural? ¿Los que os llenáis la boca hablando de sentimientos vacíos, que no existen?
Y digo yo... ¿De qué os sirve eso si ni siquiera intentáis escuchar a las flores, ni respiráis el aroma del viento, ni llamáis "preciosa" a la Luna?